Atlántico Diario

Piden a los dueños de Alfageme entre 18 y 56 millones de indemnización

Los dueños de Alfageme, que se encuentra en concurso de acreedores, se enfrentan a indemnizaciones, por gestión culposa, que van de los 17,8 millones que solicita el fiscal a los 56,3 millones que piden los administradores concursales, así como 10 años de inhabilitación.

Lago aseguró que Caixanova le llamó para entrar en la empresa y que las decisiones se tomaban con bancos e Igape

 

El juicio se celebró ayer en el Juzgado Mercantil número 3 de Pontevedra con sede en Vigo y allí Juan Lago explicó que a finales de 2006 le llamaron de Caixanova para hablar de Alfageme y que tuvo una reunión con la caja y los entonces propietarios, un grupo denominado Inversores Louredo, que había adquirido la conservera a la familia Alfageme.

YO NO SOY CONSERVERO

'Querían que me hiciera cargo y me dijeron que me darían financiación para sacarlo adelante', 50 millones, aseguró. Además, explicó que Caixanova conocía la empresa porque un consejero de la caja, García del Valle, presidía la firma de conservas. Lago afirmó'yo no soy conservero, pero insistieron'.

Entonces entra en escena el despacho Garrigues para llevar la operación en la que habría una financiación inicial de 35 millones y luego otros 15, 'porque la empresa era inviable', aseguró.

Juan Lago explicó que se hizo un plan de viabilidad con los bancos y el Igape.

Al preguntarle por qué se esperó a declarar el concurso en 2010 y no se hizo antes, Lago respondió que la empresa 'estaba en plena transformación' y 'los bancos nos habían hecho ampliar capital en 2009, cambiar de administrador único a tener consejo de administración y nombrar un director general'.

Luego empezaron los problemas para conseguir los 15 millones restantes pero Juan Lago aseguró que 'las decisiones se tomaron conjuntamente con los bancos y el Igape'.

Pero no solo eso, Lago también atribuyó a un conselleiro sin citar su nombre el hecho de que se cambiara el director general, Francisco Rivas.

Por otro lado, Gustavo Lago, hijo de Juan Lago y consejero delegado de Alfageme, explicó por qué se pagaron 2 millones de euros por incumplir un acuerdo de compra con otra conservera Thenaisie Provote, al señalar que 'no nos aportaba nada porque ya teníamos una fábrica muy buena en Ribadumia'.

También compareció José Alvarez Piñeiro, asesor de Promalar, la empresa constructora de los Lago con la que entraron en Alfageme.

Concretamente, el ministerio fiscal solicita para Juan y Gustavo Lago y para José Álvarez y para las empresas Arkiterra, Cobreiro y Oremor un total de 10 años de inhabilitación, así como una indemnización de 11,8 millones de euros solidariamente con Promalar y otros 6 millones de euros de deuda con los trabajadores. Asimismo, pide para todos ellos la pérdida de cualquier derecho que tuvieran como acreedores.

Por su parte, los administradores concursales, además de la inhabilitación por 10 años, también solicitan, como indemnización, los 11,8 millones solidariamente con Promalar y, subsidiariamente, 42,5 millones de euros. Asimismo, también piden que Gustavo Lago abone una indemnización de 2 millones de euros.

En cuanto a las defensas de los acusados, todas ellas han solicitado que el concurso sea declarado fortuito.