La Voz de Galicia

Citroën sorprende a la plantilla con un bajón de la producción y el ajuste de 150 empleos

Dejará de fabricar 7.000 furgonetas para eliminar stock hasta final de año

La vuelta al trabajo después de las vacaciones de verano prometía estable, sin días de parada a la vista y sin sobresaltos en la producción. Ese era el plan. Pero el buen ánimo de la plantilla de Citroën se desinfló ayer tras conocer que la dirección de Vigo suprimirá la fabricación de entre 6.000 y 7.000 furgonetas (Peugeot Partner y Citroën Berlingo) a partir de octubre y hasta final de año, del total de 250.000 previstas para todo el año.

La medida supone la eliminación de los turnos de fin de semana y horas extras, y la rebaja de la jornada laboral del turno de noche -con la consiguiente rebaja de sueldo-, en una línea de montaje que ha estado sobrecargada de actividad durante todo el año.

Este nuevo escenario planteado por la dirección de Citroën requerirá además de una reducción del número de horas de trabajo, un reajuste en la plantilla que los sindicatos consultados estiman en la no renovación de 150 contratos eventuales, correspondientes a los trabajadores del sexto turno, habilitado este mismo año como consecuencia de la elevada actividad, para que pudiesen descansar los empleados del turno de noche.

Contrato alemán

El recorte de producción también afectará a la línea de montaje del monovolumen C4 Picasso, sobre la que ya pesa un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de 20 días para el 2012. La propuesta de la dirección de la planta consiste en la reducción de la jornada laboral que pasaría de 8 a 6 horas. La medida, al igual que los ajustes impuestos en la línea de las furgonetas, será negociada la próxima semana con el comité de empresa pero, de entrada, los líderes sindicales ya han avanzado su preocupación por el recorte horario que se traducirá en una pérdida salarial de 300 euros mensuales para los trabajadores del C4 Picasso.

Demanda estancada

¿Cómo explica Citroën este cambio de planes, cuando hace menos de un mes, antes del inicio de las vacaciones estivales, avanzó un otoño sin bajadas de producción? Según los sindicatos consultados, la dirección de PSA enmarca la medida en el contexto de bajada de la demanda registrada en Alemania y Francia, los dos principales mercados de los coches que se fabrican en Vigo. Sin embargo, las mismas fuentes sospechan que esta decisión forma parte de la política de PSA Peugeot Citroën de reducir stock a final de año para arrancar el nuevo ejercicio con el menor lastre posible. «Nos han explicado que se trata de un ajuste general de la producción en todo el grupo, derivado del estancamiento general de la demanda», explican las mismas fuentes.

La dirección de Vigo decreta la ley seca

El botellín de cerveza a la hora de la comida ya es historia en la fábrica de Citroën. Desde el pasado 22 de agosto, una nueva normativa acordada por la dirección de la planta prohíbe por completo el consumo de alcohol en todas las instalaciones de Balaídos, incluido el comedor, en donde hasta esa fecha los trabajadores podían disfrutar del menú del día acompañado de un vaso de vino (solo uno) o de una fresca cerveza.

La medida forma parte de un nuevo protocolo que será debatido en el seno del Comité de Seguridad y Salud de la factoría en cuestión de días, con el que Citroën pretende implantar hábitos de vida más saludables entre la población trabajadora de la factoría de Balaídos.

Los representantes sindicales no han mostrado ninguna objeción a la decisión de prohibir el consumo de alcohol, ya que Vigo era la única planta del grupo en la que todavía estaba permitido. «Un botellín de cerveza en el bocadillo o en la comida no se puede llamar consumo de alcohol y nunca afectó al rendimiento, pero es una decisión que han adoptado y se acepta», explican.

Controles «antidoping»

Con lo que ya no están tan de acuerdo es con otros puntos que la dirección estudia incluir en el citado protocolo de salud y que, según las mismas fuentes, obligaría a los trabajadores a someterse a analíticas para detectar la presencia de alcohol o de otras sustancias tóxicas en la orina siempre que así lo considere la dirección de la planta. «Es un protocolo específico que están estudiando y que tenemos que debatir. No nos parece bien que la dirección maneje una información confidencial que vulnera el derecho a la intimidad de un trabajador», aseguran los sindicatos.

Las normas diseñadas por Citroën para velar por la salud de la plantilla abarcan otros aspectos de la vida cotidiana, como las recomendaciones de ejercicio físico, como un paseo durante los descansos, o estiramientos antes de incorporarse al puesto de trabajo y una vez finalizada la jornada, para evitar lesiones musculoesqueléticas.