Faro de Vigo

Pescanova salva las cuentas de 2014 con los beneficios de 12 filiales y la quita financiera

Solo Pescafina, la comercializadora del grupo, ganó 130,8 millones, frente a las pérdidas de 132,5 de otras 28 subsidiarias -Las firmas gallegas, con "números rojos" de 63,6 millones

La máquina comercial y acuícola de Pescanova ha sido capaz de volver a ensamblar las piezas maltrechas de la multinacional gallega, que cerró 2014 con más de 1.000 millones de facturación (901 hasta noviembre). La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) publicó ayer las cuentas anuales auditadas de la compañía, cuyas cifras principales se avanzaron ya en febrero, pero que desgranan en qué segmentos de negocio se recupera la empresa y en cuáles no. De las cuarenta sociedades que conforman el grupo consolidado de Pescanova, doce de ellas aportaron un beneficio neto de 145,588 millones de euros. Las 28 restantes se anotaron unos números rojos de 132,522 millones. Los beneficios de las subsidiarias -todas extranjeras, a excepción de Pescafina y Novapesca Trading-, junto con el efecto de la quita de 1.884 millones en la deuda del grupo, elevan a 1.654 millones los beneficios de Pescanova en 2014 y fortalecen las posibilidades de supervivencia del gigantepesquero, que aún debe afrontar serios retos en los próximos meses.

La mejor noticia para la pesquera es que ha logrado reforzar el área de comercialización, gracias a la salida de concurso de Pescafina -la trader del grupo- y a la fortaleza de su marca. Pescafina, con sede en Madrid, cerró 2013 con pérdidas de 77,35 millones, pero ha dado la vuelta a estas cifras con beneficios de 130,8 millones. La división comercial e industrial de Pescanova facturó 709,48 millones entre enero y noviembre de 2014 y, por primera vez, obtuvo un resultado positivo de 18,36 millones. Las áreas de pesca extractiva y acuicultura -esta última penalizada por el cultivo de rodaballo en Galicia- todavía no aportan ganancias a la multinacional con sede en Chapela. Al margen de la filial madrileña, destaca también el buen resultado de Argenova (Argentina), con beneficios de 4,716 millones pese a estar en concurso de acreedores. Este dato -en 2013 su resultado fue de 1,3 millones- se debió principalmente a la histórica campaña del gambón argentino.

De las doce sociedades que no sufrieron pérdidas el año pasado, cinco se dedican a la pesca extractiva o al cultivo de langostino vannamei. Además de Argenova están Nova Honduras (con cinco subfiliales), Promarisco (de Ecuador, con cuatro firmas dependientes), Marnova (pesquera de Angola) y Camanica (de Nicaragua, con otras cinco filiales). Las otras siete se dedican a la venta de productos de Pescanova en España, países de la UE (Portugal, Grecia, Francia o Italia) y en Japón.

Filiales españolas

El balance más negativo está en el resultado de las filiales españolas en concurso de acreedores. A excepción de Novapesca Trading, todas ellas sufrieron pérdidas. Bajamar Séptima (Arteixo) registró números rojos por 18,7 millones, por los 15,4 de Insuiña (con instalaciones en Xove, O Grove y Santa María de Oia) o los 6,6 de Pescafresca. Tampoco fue un buen ejercicio para Pescanova Alimentación, Frinova, Frigodis, Fricatamar, Frivipesca Chapela y Pescafina Bacalao. Precisamente ayer el Mercantil 1 de Pontevedra notificó ayer las providencias por las que admite a trámite las propuestas de convenio de todas estas sociedades. La administración concursal, Deloitte, deberá evaluarlas y los acreedores deberán suscribirlas o rechazarlas el 21 y 22 de mayo. Dos firmas, Bajamar y Frinova (Porriño) son las que tienen más dificultades a día de hoy para salvarse de la liquidación.

Las cuentas publicadas son las primeras que audita Ernst&Young tras la renuncia de BDO, imputada por el caso Pescanova en la Audiencia Nacional. Como avanzó ayer FARO, E&Y no incluye ninguna salvedad sobre el balance contable. Pese al buen dato de ventas, la compañía tiene todavía un patrimonio neto de -617 millones y un fondo de maniobra negativo, por lo que todavía precisa implementar su plan de recapitalización y el rescate de sus filiales para despejar cualquier incertidumbre sobre su futuro.