Cardama consigue contratos para construir dos barcos y opta a 4 más
El astillero vigués tiene carga de trabajo en la reparación y estos pedidos le aseguran actividad para casi dos años
Cardama se suma a la lluvia de contratos conseguidos en la última semana en el naval de la Ría.
El astillero vigués ganó recientemente dos concursos públicos
internacionales para construir un buque multipropósito de 42 metros y un
remolcador de 24 metros, según pudo saber este diario. El primero ya le
fue adjudicado, pero aún está pendiente la firma -se espera en febrero-
para ponerlo en vigor, de ahí la cautela a la hora de indicar el
armador y el coste. Cardama espera iniciarlo la próxima primavera y
tiene un plazo de entrega de 18 meses, lo que le asegura carga de
trabajo para casi dos años. El otro pedido generará actividad por 12
meses.
Además, el astillero podría engordar más su cartera de pedidos ya que está pendiente del fallo de un total de cuatro concursos internacionales a los que se presentó.
En la actualidad está terminando la construcción de una multicak autopropulsada de 20 metros para Angola y su entrega está prevista para el próximo mes de agosto.
Además, el astillero podría engordar más su cartera de pedidos ya que está pendiente del fallo de un total de cuatro concursos internacionales a los que se presentó.
En la actualidad está terminando la construcción de una multicak autopropulsada de 20 metros para Angola y su entrega está prevista para el próximo mes de agosto.
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Esto es sólo en materia de construcción porque donde tiene un nicho importante de actividad es en la reparación de barcos, con plena carga de trabajo hasta finales de abril que garantizan trabajo para toda la plantilla (unas 70 personas) y auxiliares (250 empleos). Aquí también tiene varias negociaciones en marcha para obras de transformaciones de buques extranjeros que se harían en las instalaciones de Beiramar.
El astillero es uno de los que mejor capeó la crisis del naval en los últimos años ya que nunca estuvo sin actividad, no recurrió a ningún ERE ni pasó un proceso concursal e incluso llegó a contratar personal tras asistir a la feria viguesa Empregalia. Cerró 2013 como uno de los mejores años de su historia en cuanto a volúmenes de reparación, una treintena, de los que el 90% correspondieron a países del extranjero.
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