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17 de diciembre de 2012

La Razon

Los concursos de acreedores baten récords con más de 6000 en 2011

El número de concursos de acreedores (antigua suspensión de pagos) contabilizados en España en 2011 fue de 6.056, lo que supone un aumento del 12 % frente a los 5.407 registrados en 2010 y la cifra más alta jamás contabilizada, según los datos facilitados hoy por la consultora Informa D&B.

Con el consumo por los suelos y la banca más preocupada de tapar sus agujeros que de dar crédito, la destrucción del tejido industrial galopa a todo trote. En las dos últimas semanas se han hecho públicos tres informes sobre la evolución de los concursos de acreedores –la antigua suspensión de pagos– a cada cual peor. Los dos últimos, lanzados ayer por D&B y Crédito y Caución, arrojan resultados demoledores y desoladores a partes iguales: por primera vez en la historia, el número de insolvencias superó las 6.000 el año pasado. Si el primero asegura que fueron 6.056, un 12% más que en 2010, el segundo eleva la cifra a 6.486, un 14% por encima del registro del ejercicio anterior. Desde que arrancó la crisis, los concursos se han incrementado un 505%, según los datos de D&B.

Muestra

La solicitud de concurso no implica la disolución inmediata de la compañía, aunque es un buen barómetro de la salud empresarial. Según un estudio de la Fundación de Estudios Económicos (Fedea), entre 2004 y 2008 sólo el 5% de las sociedades que lo solicitaron consiguieron reorganizarse con éxito. Los datos, aunque puedan denotar una tendencia, son sólo la punta del iceberg. El Consejo General de Economistas Forenses asegura que sólo el 2% de las empresas que cesan su actividad en España lo hace a través de un concurso.

Como viene ocurriendo desde que arrancó la crisis, el sector del ladrillo –construcción y promoción inmobiliaria– sigue acaparando el grueso de los procesos. En 2011, 2.359 compañías dedicadas a ambas actividades tuvieron que acogerse al mismo, el 38,95% del total de las que lo hicieron. Aunque Crédito y Caución asegura que, según sus datos, los procesos de este sector cayeron un 12%, lo que demostraría que el grueso del ajuste del sector del ladrillo ya ha concluido, los datos de D&B no dicen lo mismo, pues hablan de un crecimiento de las insolvencias en el sector de la construcción del 6,59% y de un aumento del 21,27% en las actividades inmobiliarias. Tras el constructor, el de la industria manufacturera es el segmento más afectado por las suspensiones de pagos. 1.169 de sus compañías se declararon insolventes el pasado ejercicio, un 4,84% más que en 2010.

LA LUPA

La situación no mejorará en el primer semestre del año

Y en 2012, ¿qué? Para Crédito y Caución, más de lo mismo. «No hay ningún indicio que permita anticipar un descenso en estos niveles, al menos en el primer semestre del año», avanza la empresa. El único clavo ardiendo al que cabe agarrarse es el exportador, si bien informes del BBVA, Funcas o la propia Unión Europea apuntan una notable ralentización de las ventas al exterior durante este año. Porque los otros factores que podrían contribuir a mejorar la salud de las empresas, la reactivación de la demanda interna y de la financiación bancaria, una de las principales causas de impago, insolvencia y concurso, están lejos de recuperarse, según Crédito y Caución.

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