Los pocos trabajadores que le quedan al naval salen a la calle
Las grandes manifestaciones del naval vigués pasaron a la historia. Con apenas 2.500 empleados en el sector -hace tres años superaban con creces los 15.000- y una industria que agoniza es fácil entenderlo. La que la CIG convocó ayer en Vigo reunió a apenas un millar de personas bajo el lema 'Salvemos al sector naval'.
Las grandes manifestaciones del naval vigués pasaron a la historia. Con apenas 2.500 empleados en el sector -hace tres años superaban con creces los 15.000- y una industria que agoniza es fácil entenderlo. La que la CIG convocó ayer en Vigo reunió a apenas un millar de personas bajo el lema 'Salvemos al sector naval'.
300 empleados fueron despedidos en diciembre tras acabar su ERE temporal, según la CIG
El portavoz del sindicato nacionalista, César Rodríguez, dijo que sólo en el mes de diciembre unos 300 trabajadores pasaron de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) temporal a uno de extinción (despido) y que la pérdida de empleo en los astilleros de la Ría y las empresas auxiliares 'es el anuncio de que el sector se está muriendo'.
La marcha, que partió pasadas las ocho de la tarde del cruce de Vía Norte con Urzaiz, contó con el apoyo del BNG, con la presencia de Henrique Viéites, Santiago Domínguez e Iolanda Veloso. Finalizó en el edificio de la Xunta, donde urgieron una solución a la administración con el sistema fiscal 'tax lease' para que se puedan volver a contratar barcos.
Un grupo numeroso de los manifestantes lo formaban trabajadores de Barreras y de Vulcano, los dos grandes astilleros de Vigo que están en concurso de acreedores y sin nada de actividad.
CC OO -no participó en la marcha, convocada sólo por la CIG- remitió un comunicado en el que informaba de que solicitó una reunión con el secretario general de Industria para que se posicione a favor del convenio de acreedores de Vulcano (propone una quita del 80% de la deuda) y evitar así su cierre inmediato.
La plantilla de Factoría Naval de Marín -en preconcurso y sin carga de trabajo- se concentró ayer ante la sede de Novagalicia Banco en Pontevedra para expresar su malestar contra la antigua Caixa Galicia, que formaba parte del accionariado del astillero.
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