Los largos tentáculos de Citic Group
La empresa estatal china es la primera multinacional del país con 4,2 billones de dólares en activos
El gigante chino Citic Group, la primera multinacional del país asiático, desembarcó la semana pasada en Galicia a través de su filial Citic Group Heavy Industries que cerró la compra de la calderera Gándara Censa por 50 millones de euros. Según el presidente de Citic Heavy, Ren Qinxin, su compañía está dispuesta a estudiar otros sectores en la comunidad donde invertir. El holding chino abarcan todas las actividades económicas y quiere seguir creciendo e invirtiendo en empresas rentables. Dispone de mucho, mucho, dinero para ello.
L.PIÑERO - VIGO ¿Quién es el nuevo dueño de Gándara Censa? Pues nada menos que el Gobierno chino. Citic Group es una compañía que nació en 1979 impulsada por el entonces presidente Deng Xiaoping, principal arquitecto de la reforma y apertura del país, con el objetivo de crear una compañía bancaria de inversión de corte occidental y que fuese la punta de lanza que impulsara el desarrollo chino, dejando al margen a la pesada burocracia de Pekín.
Xiaoping encomendó a Rong Yiren, hijo de uno de los hombres más ricos de China en los años 30, la constitución del holding de inversión que siguiera las pautas de la economía capitalista aunque el control absoluto seguiría en manos del Estado. El entonces presidente chino dispuso que la multinacional fuese capaz de invertir en cualquier negocio en el extranjero que se considerase rentable. El primer ejecutivo de Citic Group cumplió las órdenes con creces porque estaba forjado en mil batallas.
El fundador de Citic, Rong Yiren, fue uno de los pocos capitalistas que permanecieron en China continental tras la llegada de Mao Tse Tung en 1949 a pesar de que vio como se nacionalizaban sus fábricas y sufrió persecuciones y torturas por parte de la Guardia Roja durante la Revolución Cultural en 1960. Después de vivir una década en la oscuridad, Ron Yiren fue rehabilitado públicamente al final de los años 70 y en 1993 fue nombrado vicepresidente de la República Popular China, cargo del que dimitió en 1997.
Para lanzar Citic Group, Rong se rodeó de un grupo ejecutivo formado por antiguos hombres de negocios y jóvenes tecnócratas con talento para establecer nuevas maneras de hacer negocios en China. En vez de invertir solo en los proyectos que eran parte de los planes quinquenales de Pekín, la innovadora agencia recorrió su propio país en busca de oportunidades de inversión. Una de sus primeras operaciones en el exterior fue crear una empresa cervecera conjunta con Japón para ampliar la producción. En solo dos años los beneficios de multiplicaron por dos.
El férreo Estado chino dio entonces a Citic Group libertad para invertir en todos los proyectos extranjeros con garantías de rentabilidad. El abanico inversor de la compañía se abrió al máximo. Entre otras operaciones destacadas, la multinacional china alcanzó una alianza con la compañía de productos envasados norteamericana "Beatriz"; vendió helicópteros para United Technologies a través de una empresa subsidiaria; se convirtió en la mayor accionista de las minas de carbón de la empresa australiana Mcarthur´s, financió fábricas de productos textiles, químicos y de producción de maquinaria, además de llegar a convertirse en una de las grandes promotoras inmobiliarias mundiales. De hecho, ocupa el número 32 en el ranking de los "Top 225 International Contractors", escalando en un solo año 27 puestos.
La revista "Fortune" situó en 2010 Citic Group en el puesto 254 en su lista de las 500 principales compañías del mundo, ganando 161 puestos en relación al año anterior.
Para conseguir fondos de sus operaciones, además de los que obtiene en su propio país, recurre a la venta de bonos en Hong Kong, Japón y Alemania. Sin embargo, tiene problemas con los mercados de capitales de Estados Unidos por dejar de pagar en 1930 los intereses de los bonos de la construcción del ferrocarril. Aún así no desistió de su empeño y llegó a instalarse en unas oficinas de las Torres Gemelas para negociar directamente con las entidades financieras norteamericanas. Al poco tiempo, las oficinas de Citic en Nueva York se convirtieron en un avispero de hombres de negocios ávidos de ofrecer oportunidades de inversión al gigante chino. Ahora Rong Yiren tiene dos frentes abiertos: el primero convencer a los gobiernos y empresas occidentales de que el libre mercado va a seguir vigente en la República Popular China y, en segundo lugar, la creación de una Bolsa en su país.
Alianza con BBVA y ACS
El segundo banco español, el BBVA, es socio desde hace tiempo del China Citic Bank y hace unos días elevó su participación hasta el 15% al ejercer su opción de compra sobre otro 4,93% con un desembolso de cerca de mil millones de dólares, con lo que el banco que preside el gallego Francisco González ya ha invertido 3.000 millones en el músculo financiero de Citic Group. Esta operación sitúa al banco español en una inmejorable situación para servir de puente a las empresas en los dos países. La entrada del BBVA en el mercado chino se produce en un momento de fuerte desarrollo en su mercado financiero y de un importante crecimiento económico, con tasas anuales de PIB en torno al 10%.
También ACS, la empresa del presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, adquirió en 2008 el 30% de la división de construcción de Citic Group para "entrar en el mayor mercado de obra civil del mundo". ACS ya estaba desde 2003 en el mercado chino a través de su negocio de gestión de puertos. Dragados SPL se hizo entonces con la gestión durante 50 años del tráfico de contenedores del puerto de Jing-Tang, ubicado a 200 kilómetros al Sur de Pekín.
Desembarco en Galicia
Esta semana, Citic Heavy Industries cerró la compra del 100% de la calderera Gándara Censa con una planta en Porriño que da trabajo a 300 personas. El presidente de la compañía, Ren Qinxin, señaló que con esta compra permitirá a esta división del Citic Group consolidarse como un referente mundial de maquinaría para minería. Qinxin se comprometió a realizar inversiones para ampliar la fábrica, diversificar la producción y ampliar la plantilla, así como mantener a la cúpula directiva en sus puestos.
El presidente de Citic Heavy afirmó también que el holding estudiará nuevas inversiones en otros sectores de la comunidad gallega.
Xiaoping encomendó a Rong Yiren, hijo de uno de los hombres más ricos de China en los años 30, la constitución del holding de inversión que siguiera las pautas de la economía capitalista aunque el control absoluto seguiría en manos del Estado. El entonces presidente chino dispuso que la multinacional fuese capaz de invertir en cualquier negocio en el extranjero que se considerase rentable. El primer ejecutivo de Citic Group cumplió las órdenes con creces porque estaba forjado en mil batallas.
El fundador de Citic, Rong Yiren, fue uno de los pocos capitalistas que permanecieron en China continental tras la llegada de Mao Tse Tung en 1949 a pesar de que vio como se nacionalizaban sus fábricas y sufrió persecuciones y torturas por parte de la Guardia Roja durante la Revolución Cultural en 1960. Después de vivir una década en la oscuridad, Ron Yiren fue rehabilitado públicamente al final de los años 70 y en 1993 fue nombrado vicepresidente de la República Popular China, cargo del que dimitió en 1997.
Para lanzar Citic Group, Rong se rodeó de un grupo ejecutivo formado por antiguos hombres de negocios y jóvenes tecnócratas con talento para establecer nuevas maneras de hacer negocios en China. En vez de invertir solo en los proyectos que eran parte de los planes quinquenales de Pekín, la innovadora agencia recorrió su propio país en busca de oportunidades de inversión. Una de sus primeras operaciones en el exterior fue crear una empresa cervecera conjunta con Japón para ampliar la producción. En solo dos años los beneficios de multiplicaron por dos.
El férreo Estado chino dio entonces a Citic Group libertad para invertir en todos los proyectos extranjeros con garantías de rentabilidad. El abanico inversor de la compañía se abrió al máximo. Entre otras operaciones destacadas, la multinacional china alcanzó una alianza con la compañía de productos envasados norteamericana "Beatriz"; vendió helicópteros para United Technologies a través de una empresa subsidiaria; se convirtió en la mayor accionista de las minas de carbón de la empresa australiana Mcarthur´s, financió fábricas de productos textiles, químicos y de producción de maquinaria, además de llegar a convertirse en una de las grandes promotoras inmobiliarias mundiales. De hecho, ocupa el número 32 en el ranking de los "Top 225 International Contractors", escalando en un solo año 27 puestos.
La revista "Fortune" situó en 2010 Citic Group en el puesto 254 en su lista de las 500 principales compañías del mundo, ganando 161 puestos en relación al año anterior.
Para conseguir fondos de sus operaciones, además de los que obtiene en su propio país, recurre a la venta de bonos en Hong Kong, Japón y Alemania. Sin embargo, tiene problemas con los mercados de capitales de Estados Unidos por dejar de pagar en 1930 los intereses de los bonos de la construcción del ferrocarril. Aún así no desistió de su empeño y llegó a instalarse en unas oficinas de las Torres Gemelas para negociar directamente con las entidades financieras norteamericanas. Al poco tiempo, las oficinas de Citic en Nueva York se convirtieron en un avispero de hombres de negocios ávidos de ofrecer oportunidades de inversión al gigante chino. Ahora Rong Yiren tiene dos frentes abiertos: el primero convencer a los gobiernos y empresas occidentales de que el libre mercado va a seguir vigente en la República Popular China y, en segundo lugar, la creación de una Bolsa en su país.
Alianza con BBVA y ACS
El segundo banco español, el BBVA, es socio desde hace tiempo del China Citic Bank y hace unos días elevó su participación hasta el 15% al ejercer su opción de compra sobre otro 4,93% con un desembolso de cerca de mil millones de dólares, con lo que el banco que preside el gallego Francisco González ya ha invertido 3.000 millones en el músculo financiero de Citic Group. Esta operación sitúa al banco español en una inmejorable situación para servir de puente a las empresas en los dos países. La entrada del BBVA en el mercado chino se produce en un momento de fuerte desarrollo en su mercado financiero y de un importante crecimiento económico, con tasas anuales de PIB en torno al 10%.
También ACS, la empresa del presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, adquirió en 2008 el 30% de la división de construcción de Citic Group para "entrar en el mayor mercado de obra civil del mundo". ACS ya estaba desde 2003 en el mercado chino a través de su negocio de gestión de puertos. Dragados SPL se hizo entonces con la gestión durante 50 años del tráfico de contenedores del puerto de Jing-Tang, ubicado a 200 kilómetros al Sur de Pekín.
Desembarco en Galicia
Esta semana, Citic Heavy Industries cerró la compra del 100% de la calderera Gándara Censa con una planta en Porriño que da trabajo a 300 personas. El presidente de la compañía, Ren Qinxin, señaló que con esta compra permitirá a esta división del Citic Group consolidarse como un referente mundial de maquinaría para minería. Qinxin se comprometió a realizar inversiones para ampliar la fábrica, diversificar la producción y ampliar la plantilla, así como mantener a la cúpula directiva en sus puestos.
El presidente de Citic Heavy afirmó también que el holding estudiará nuevas inversiones en otros sectores de la comunidad gallega.
No hay comentarios:
Publicar un comentario