La banca controla Pescanova con Sabadell, Popular y La Caixa a la cabeza
La empresa dice que "es un gran día" tras aprobarse el convenio de Pescafina y avanzar la alta adhesión para la matriz
Pescanova se dirige hacia la salida del concurso. El primer paso en firme se dio ayer con la junta de acreedores de Pescafina, la filial madrileña que es el brazo comercial de Pescanova, cuya propuesta de convenio logró un 68,89% de adhesión de los acreedores. Además, ayer finalizó el plazo de entrega de las adhesiones al convenio de la matriz, Pescanova, para la que se prevé un apoyo similar, muy por encima de lo necesario para salir del concurso, aunque el dato definitivo se conocerá probablemente mañana viernes.
Los acreedores se han volcado para apoyar a la compañía y de hecho algunos con deudas pequeñas quisieron pasar igualmente por la notaría, a pesar del coste, para mostrar su respaldo a la empresa, lo que demuestra el interés del tejido empresarial vigués. Entre los grandes acreedores, además de la banca que pasará a controlar Pescanova (Sabadell, Popular, Caixabank, BBVA, Bankia y UBI Banca), también se adhirieron al convenio banca internacional como HSBC o Citi.
La compañía dijo ayer en un comunicado que “es un gran día” en su historia y que se ha dado el primer paso de una nueva fase en la que “continuará como una de las principales multinacionales gallegas y referencia en el sector pesquero mundial”, tras constatar el apoyo a Pescafina y que “todos los datos disponibles en este momento anticipan un apoyo mayoritario a la propuesta” de Pescanova.
La aprobación del convenio de Pescafina es determinante para el de Pescanova, porque ambos tienen recíprocamente condicionada su eficacia, si no se aprueba uno el otro tampoco aunque tenga la mayoría necesaria.
En la nueva etapa que se abre, los bancos Sabadell, Popular y Caixabank serán los principales accionistas de la empresa viguesa, una vez que se produzca la ampliación de capital, ya que el reparto se realizará en función de la deuda y estos tres son los principales acreedores. En ese tramo también estarán Novagalicia, BBVA, Bankia y UBI Banca, los siete que han pilotado el proceso. La ampliación de 150 millones de euros se producirá tras una operación acordeón, que supone primero la reducción del capital a cero.
Los acreedores se han volcado para apoyar a la compañía y de hecho algunos con deudas pequeñas quisieron pasar igualmente por la notaría, a pesar del coste, para mostrar su respaldo a la empresa, lo que demuestra el interés del tejido empresarial vigués. Entre los grandes acreedores, además de la banca que pasará a controlar Pescanova (Sabadell, Popular, Caixabank, BBVA, Bankia y UBI Banca), también se adhirieron al convenio banca internacional como HSBC o Citi.
La compañía dijo ayer en un comunicado que “es un gran día” en su historia y que se ha dado el primer paso de una nueva fase en la que “continuará como una de las principales multinacionales gallegas y referencia en el sector pesquero mundial”, tras constatar el apoyo a Pescafina y que “todos los datos disponibles en este momento anticipan un apoyo mayoritario a la propuesta” de Pescanova.
La aprobación del convenio de Pescafina es determinante para el de Pescanova, porque ambos tienen recíprocamente condicionada su eficacia, si no se aprueba uno el otro tampoco aunque tenga la mayoría necesaria.
En la nueva etapa que se abre, los bancos Sabadell, Popular y Caixabank serán los principales accionistas de la empresa viguesa, una vez que se produzca la ampliación de capital, ya que el reparto se realizará en función de la deuda y estos tres son los principales acreedores. En ese tramo también estarán Novagalicia, BBVA, Bankia y UBI Banca, los siete que han pilotado el proceso. La ampliación de 150 millones de euros se producirá tras una operación acordeón, que supone primero la reducción del capital a cero.
Nueva Pescanova
La banca estima que el proceso hasta llegar a crear Nueva Pescanova se demorará unos cuatro meses, por lo que ahora las primeras decisiones deberían ir encaminadas a quién dirigirá la compañía, una vez que los administradores concursales concluyan su trabajo, que aún durará un mes más.
También en los próximos días tendrá que decidir sobre la entrada de un socio industrial para dirigir la compañía o bien contratar un consejero delegado, que algunos apuntan se podría haber ofrecido a Senén Touza, uno de los administradores concursales.
Ahora se abre un periodo transitorio en el que se tomarán muchas decisiones para que la marcha de la compañía no se detenga.
Ayer Pescanova quiso agradecer el trabajo de los empleados del grupo "que han demostrado una gran profesionalidad y dedicación" en los momentos difíciles, también agradeció a clientes y proveedores la comprensión y reconoció el apoyo de la banca, accionistas y la Xunta, así como del comité de empresa.
La banca estima que el proceso hasta llegar a crear Nueva Pescanova se demorará unos cuatro meses, por lo que ahora las primeras decisiones deberían ir encaminadas a quién dirigirá la compañía, una vez que los administradores concursales concluyan su trabajo, que aún durará un mes más.
También en los próximos días tendrá que decidir sobre la entrada de un socio industrial para dirigir la compañía o bien contratar un consejero delegado, que algunos apuntan se podría haber ofrecido a Senén Touza, uno de los administradores concursales.
Ahora se abre un periodo transitorio en el que se tomarán muchas decisiones para que la marcha de la compañía no se detenga.
Ayer Pescanova quiso agradecer el trabajo de los empleados del grupo "que han demostrado una gran profesionalidad y dedicación" en los momentos difíciles, también agradeció a clientes y proveedores la comprensión y reconoció el apoyo de la banca, accionistas y la Xunta, así como del comité de empresa.
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