El consejo de Pescanova tilda el plan de la banca de ´insostenible´ e ´incierto´
Considera "realista" el proyecto de Damm y Luxempart, el único presentado ante el juez
El futuro de Pescanova se ha convertido en un pulso entre su consejo y la banca acreedora. Una pugna que va a continuar previsiblemente hasta el último día de plazo para adherirse a la propuesta de convenio, el 15 de abril. El consejo de la pesquera, que preside Juan Manuel Urgoiti, decidió asumir ayer el protagonismo -al menos mediático- con un comunicado que no solo defiende de forma clara el plan de Damm y Luxempart, sino que arremete contra las entidades financieras. Los primeros ya saben que no cuentan con el plácet de la banca, y la liquidación ordenada de Pescanova echaría al traste los planes del grupo cervecero. A juicio del consejo, la de Damm y Luxempart es la única propuesta realista para resucitar Pescanova, frente a otra "insostenible" e "incierta" que, creen los consejeros, preparan los bancos.
La única propuesta admitida a trámite por el juez es la de Damm. "El consejo desconoce las razones por las cuales ninguno de los grupos acreedores presentó propuesta alternativa", dijo ayer en su nota. Frente a esta afirmación, la banca optó por no amilanarse. "No se presentó ningún plan alternativo porque se había llegado a un acuerdo con Damm-Luxempart que luego fue modificado por ellos sin nuestro conocimiento", replica una de las entidades más tocadas por la crisis de la compañía. "Y a diversos consejeros se les ha comunicado tal circunstancia", agrega la misma fuente.
Desde el entorno de Pescanova aseguran que esta "presión" irá "en aumento" hasta que los bancos "rectifiquen" y amenazan con publicar "todos los números" con lo que recuperaría cada entidad" con su propuesta de convenio. El consejo justificó ayer por qué la quita es desigual, pero niega las grandes pérdidas de las que hablan los bancos. "Otros acreedores -prosigue la nota oficial- recuperan cifras cercanas al 35%" de su deuda, e incide en que algunos bancos podrían sufrir quitas inferiores al 50%. En las entidades no preocupa que el consejo desvele datos entidad por entidad. "Los cálculos los hemos hecho todos ya", replican al consejo.
En la nota difundida por el consejo, designado tras la junta de accionistas de septiembre (y controlado por Damm), explicó que la deuda total que tendrá Pescanova tras el convenio será de casi 1.000 millones, un nivel muy elevado en relación al Ebitda (resultado bruto). "Cifra que no bajará a niveles aceptables de 6 veces el Ebitda hasta 2020", para lo que Pescanova debería triplicar el resultado bruto obtenido en 2013. El consejo advierte de que el camino para la compañía será difícil, pero insiste en que el plan de Damm es "realista". "El consejo no va a proponer un convenio que sobrepase de forma irresponsable el techo de deuda postconcursal que la propia empresa puede asumir", advierten en la firma.
Los bancos dieron por "rotas" esta semana las negociaciones con Damm y comunicó ya al juez que ultiman su propio plan de rescate, que pasaría por hacerse por los activos -como grupo, no diseminados-, inyectar 150 millones y dejar la gestión en manos de un socio industrial gallego. El presidente del Sabadell, Josep Oliú, incidió ayer también en que el futuro de Pescanova está en fase de discusión y aseguró que la viabilidad de la pesquera "se hará con o sin socio industrial, pero con una gestión independiente". La banca encomendó a KPMG que diseñe el plan B, que quieren entregar antes de que Deloitte emita su valoración sobre la propuesta de convenio de Damm y Luxempart.
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